Después de que el Tribunal Supremo haya revocado definitivamente los peajes a camiones en la N-1 y la A-15, la Diputación Foral de Guipúzcoa no es capaz de afrontar este nuevo revés judicial y, lejos de eliminar esta medida injusta y discriminatoria, ahora anuncia que extenderá los peajes en todo el recorrido de dichas vías.
La Diputación se ve obligada a cambiar la forma de la normativa ante su empeño de seguir cobrando a los vehículos pesados y lo hará cueste lo que cueste. Es lo que demuestra el anuncio realizado por la diputada foral de Infraestructuras, Aintzane Oiarbide, que señala a nuestro sector sin tapujos culpabilizándole, además, de esta nueva alternativa.
En lugar de admitir la decisión del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco y del Tribunal Supremo, que ha dado la razón al sector del transporte por carretera al considerar que los peajes injustos y discriminatorios, y no contenta con esta nueva astucia para seguir cobrando a los vehículos pesados, Oiarbide amenaza con analizar “uno por uno los casos de reclamación de los trasportistas”.
Ante esto, la Confederación Española de Transporte de Mercancías (CETM) pide a la Diputación de Guipúzcoa que acate las decisiones judiciales y deje de perseguir a un sector que es vital para el funcionamiento de la economía y de la sociedad en su conjunto.
La principal patronal del transporte de mercancías ya trabaja enérgicamente en un sistema que facilite a sus empresas asociadas la reclamación de los importes abonados hasta el momento, así como los intereses de demora, y advierte que no permanecerá impasible ante la nueva norma que prepara la Diputación y emprenderá las acciones necesarias para dar fin a esta obcecación.